Nebille G. Elección

Nebille Goddard. Elección y libre albedrio

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Neville Goddard tenía una perspectiva interesante sobre la elección y el libre albedrío. Según él, nuestra verdadera libertad radica en la capacidad de elegir nuestro estado de conciencia, mientras que el mundo externo es solo un reflejo de lo que hemos elegido internamente.

Aquí te detallo cómo entendía Goddard la elección y el libre albedrío:

El Libre Albedrío y los Estados de Conciencia: Neville sostenía que el libre albedrío no se aplica tanto a los eventos externos de nuestras vidas, ya que esos eventos son el resultado de estados de conciencia que ya hemos asumido. En cambio, nuestro verdadero poder de elección está en elegir el estado de conciencia en el que queremos habitar. Esto significa que puedes elegir conscientemente sentirte como si ya fueras la persona que deseas ser o ya tuvieras aquello que deseas tener.
El Mundo Externo como Reflejo: Según Goddard, el mundo externo no tiene un poder real sobre nosotros, ya que es simplemente una proyección de nuestro mundo interno. Los eventos y circunstancias externas son el resultado de nuestros estados de conciencia, por lo que cambiar el estado de conciencia es la forma de cambiar lo que experimentamos externamente. Aquí es donde radica el poder del libre albedrío: en la capacidad de asumir una nueva realidad mental y emocional.
Elegir la Realidad que Deseas: Neville enseñaba que todos los estados posibles de ser ya existen. La «creación está terminada», lo que significa que todas las posibilidades ya están disponibles, y lo único que debemos hacer es elegir cuál de esas posibilidades queremos experimentar. No estamos creando desde cero, sino seleccionando lo que ya existe en el infinito campo de posibilidades mediante nuestra imaginación y creencia.
La Asunción como Acto de Elección: Cuando asumimos que somos o tenemos algo, estamos ejerciendo nuestro libre albedrío para elegir esa realidad. Esto implica la responsabilidad de tomar conciencia de nuestros pensamientos y emociones, y de dirigirlos hacia la asunción del estado deseado. Elegir conscientemente lo que pensamos y sentimos nos permite asumir la realidad que queremos experimentar.
No Resistir lo que Ya se Manifestó: Una vez que un estado se manifiesta en el mundo físico, Neville enfatizaba la importancia de no resistirse a lo que ya ha ocurrido. Si no te gusta la realidad presente, es un reflejo de un estado anterior que asumiste, pero en lugar de luchar contra ella, debes cambiar tu estado de conciencia ahora para crear una nueva experiencia futura.
El Poder está en el Ahora: Goddard decía que la única libertad verdadera que tenemos está en el momento presente, en elegir qué imaginar, qué creer y qué sentir ahora. No podemos cambiar el pasado, y el futuro depende de lo que asumimos en el presente. Es en este momento en el que podemos ejercer nuestro poder para cambiar nuestro estado de conciencia y, por ende, nuestra realidad futura.

Para Neville Goddard, la elección y el libre albedrío están directamente ligados al poder de nuestra imaginación y a la capacidad de asumir estados de conciencia. Aunque los eventos externos pueden parecer fuera de nuestro control, nuestro verdadero poder está en elegir cómo reaccionamos internamente y qué estado asumimos. Esta es la manera de ejercer nuestro libre albedrío y manifestar la realidad que deseamos experimentar.

ELECCIÓN – LIBRE ALBEDRÍO

La creación está terminada y tú tienes libre albedrío para elegir el estado que vas a ocupar. Por lo tanto, es importante determinar las ideas en las que basas tu manera de pensar. Cualquier concepto que sea aceptado como verdad se exteriorizará en tu mundo externo. Elegir en lo que vas a enfocar tu atención es la única libertad que puedes ejercer. Una vez que un pensamiento es aceptado y cargado con sentimiento, el poder creativo interior procede a exteriorizarlo. Tanto si tus asunciones son conscientes como inconscientes dirigen toda acción para su cumplimiento. Es una ilusión que, además de asumir el sentimiento del deseo cumplido, puedas hacer algo para ayudar a su realización. Tu propia maravillosa imaginación humana determina los medios que usará para llevar tus asunciones a su realización.

Cada uno de nosotros está sujeto a un mar de ideas. Escuchamos la radio, vemos las noticias en la televisión, o escuchamos algún chisme. Si lo que observamos provoca una emoción, hemos reaccionado y, con ello, plantado una semilla que germinará en algún momento futuro. Los pensamientos no se alejan hacia el pasado, sino que avanzan hacia el futuro para confrontarnos de modo que podamos ver lo que hemos plantado, ya sea con sensatez o imprudentemente.

Hay un ejercicio que merece el esfuerzo y es al levantarte por la mañana imaginarte al final de tu día, habiendo logrado todo lo que querías y sintiéndote feliz y contento.

Si hay una situación que te encontrarás más adelante en el día y que es de tu interés, dedica unos momentos a imaginar el desenlace que deseas experimentar. Estas actividades imaginarias avanzarán entonces hacia tu futuro para revelar la cosecha que tan sabiamente plantaste.